El cambio que buscas en tu familia comienza con un paso hacia ti mismo.

Creemos que la plenitud no tiene que ver con sentir felicidad todos los días, ni evitar que te pasen cosas feas. Sino con una sensación de bienestar descubriendo lo positivo de cada experiencia.

En los primeros años de vida, es esencial la conexión entre el cuidador y el niño. Es en esos momentos donde se construyen la confianza, la autoestima y la forma en que, como adultos, nos relacionaremos con nuestras parejas, amistades y el mundo laboral.

Desde nuestros propios miedos, conflictos y aprendizajes, elegimos crecer y transformarnos. Entendemos que, aunque hoy exista mucha información, todavía hay familias, padres y madres, que sienten que no pueden salir de los conflictos, la desconexión, los mandatos o del famoso “no se que hacer”.

Por eso creamos este espacio: un lugar para crecer, conectar y sonreír. ¡Te invitamos a ser parte de este camino con nosotros!»